La responsabilidad es una característica admirable que no siempre es fácil demostrándola. No sólo se trata hacer sus tareas o trabajo a tiempo, pero debes hacer un esfuerzo para ser una persona organizada y consistente que toma decisiones correctas.
Debes planificar tu rutina diaria para completar tus tareas cada día. En tu horario debes marcar cuáles son las tareas más importantes y también dedicar tiempo para las tareas pequeñas como la limpieza del hogar o recoger la lavandería. Hay muchas aplicaciones para tu teléfono para mantenerse organizado día a día.
Cuando cumples tus promesas, las personas confiarán en tí. La puntualidad es importante, ya que llegar tarde regularmente te hace ver poco confiable. Si te ofrecen una tarea que no puedes manejar, es mejor no aceptarla.
Para superar tus tareas, debes mantenerse disciplinado. Sabemos que el trabajo y las tareas no son siempre divertidas, pero parte de ser responsable es ejercer la autodisciplina.
Mantente tranquilo y evita ser impulsivo. El autocontrol se trata de tomar decisiones positivas para no meterse en problemas.
Cuando vas a interactuar con otras personas, debes pensar en las consecuencias antes de hablar o actuar. A menudo, las malas decisiones tienen consecuencias severas que pueden meterte en muchos problemas a largo plazo. Controla tus reacciones. Piensa dos veces antes de entrar en conflicto con un amigo o compañero de trabajo.
Si quieres que la gente confíe en ti, evita las mentiras que pueden herir los sentimientos. Esfuércese por ser lo más honesto posible. Si no eres digno de confianza, nadie creerá que eres una persona responsable.
No escondas tus errores. Si te equivocas o haces daño a alguien, discúlpate y luego encuentra la manera de mejorarlo. Recuerda que los ataques personales no ayudan. En lugar de culpar a otros, encuentra soluciones para problemas y encuentra formas de mejorar la situación.
Conviértete en alguien a quien otras personas pueden admirar. Trata a otras personas con respeto y haz un esfuerzo extra para demostrar que te preocupas por los demás. Encuentra maneras de mejorar tu familia o comunidad.
¿Cómo Tratar con una Persona Irresponsable?
Evalúa la Situación. Determina que su irresponsabilidad es un inconveniente personal o te está causando un daño financiero, emocional, profesional.
Comunícate con Claridad. Sé directo, no agresivo. Asegúrate de que entiendan claramente lo que necesitas o esperas.
Establece Límites. Protegete. Si siempre llegan tarde o no es de fiar, deja de esperarlo o involucrarlo en tareas importantes. No lo rescate siempre, ya que podría usar eso para evadir la responsabilidad.
Limita la Dependencia. No dependas de ellos para tareas críticas. Si se trata de un proyecto de equipo, asígnales roles que no afecten los resultados clave. Evita ponerte en una posición en la que su irresponsabilidad te deprima.
Ofrece Ayuda. A veces, la irresponsabilidad proviene de problemas más profundos: estrés, desorganización o falta de habilidades. Puedes sugerir herramientas o recursos como la terapia si parecen dispuestos a mejorar.
Decide Si la Relación vale la Pena. En el trabajo, considera involucrar a un gerente o al departamento de Recursos Humanos si su comportamiento afecta al equipo. Si es un amigo o familiar, quizás debas distanciarte emocionalmente o reducir tu participación si te están quitando energía.